1 Os tolos dizem em seu coração:
"Não há Deus".
São corruptos e praticam o mal;
nenhum deles faz o bem.
2 O Senhor olha dos céus
para toda a humanidade,
para ver se alguém é sábio,
se alguém busca a Deus.
3 Todos, porém, se desviaram;
todos se corromperam.
Ninguém faz o bem,
nem um sequer!
4 Acaso os que praticam o mal jamais aprenderão?
Devoram meu povo como se fosse pão
e nem pensam em orar ao Senhor.
5 Grande terror se apoderará deles,
pois Deus está com os que lhe obedecem.
6 Os perversos frustram os planos dos oprimidos,
mas o Senhor protegerá seu povo.
7 Quem virá do monte Sião para salvar Israel?
Quando o Senhor restaurar seu povo,
Jacó dará gritos de alegria, e Israel exultará.
1 Al Vencedor: Salmo de David. Dijo el loco en su corazón: No hay Dios. Se corrompieron, hicieron obras abominables; no hay quien haga bien.
2 El SEÑOR miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, por ver si había algún entendido, que buscara a Dios.
3 Todos declinaron, juntamente, se han corrompido; no hay quien haga bien, no hay ni siquiera uno.
4 Ciertamente conocieron ésto todos los que obran iniquidad, que devoran a mi pueblo como si pan comiesen; al SEÑOR no invocaron.
5 Allí temblaron de espanto; porque Dios está con la nación de los justos.
6 El consejo del pobre habéis escarnecido, por cuanto el SEÑOR es su esperanza.
7 ¡Quién diese de Sion la salud de Israel tornando el SEÑOR la cautividad de su pueblo! Se gozará Jacob, y se alegrará Israel.