31 ¿Pues qué diremos á esto? Si Dios por nosotros, ¿quién contra nosotros?
7 Caerán á tu lado mil, Y diez mil á tu diestra: Mas á ti no llegará.
3 Porque no se apoderaron de la tierra por su espada, Ni su brazo los libró; Sino tu diestra, y tu brazo, y la luz de tu rostro, Porque te complaciste en ellos.
4 Tú, oh Dios, eres mi rey: Manda saludes á Jacob.
31 El caballo se apareja para el día de la batalla: Mas de Jehová es el salvar.
4 Que Jehová vuestro Dios anda con vosotros, para pelear por vosotros contra vuestros enemigos, para salvaros.
55 ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿dónde, oh sepulcro, tu victoria?
56 Ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y la potencia del pecado, la ley.
57 Mas á Dios gracias, que nos da la victoria por el Señor nuestro Jesucristo.
8 Y Jehová dijo á Josué: No tengas temor de ellos: porque yo los he entregado en tu mano, y ninguno de ellos parará delante de ti.
13 En Dios haremos proezas; Y él hollará nuestros enemigos.
13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y estar firmes, habiendo acabado todo.
37 Antes, en todas estas cosas hacemos más que vencer por medio de aquel que nos amó.
38 Por lo cual estoy cierto que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
39 Ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
4 Porque todo aquello que es nacido de Dios vence al mundo: y esta es la victoria que vence al mundo, nuestra fe.
16 Porque siete veces cae el justo, y se torna á levantar; Mas los impíos caerán en el mal.
13 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.