1 VI al Señor que estaba sobre el altar, y dijo: Hiere el umbral, y estremézcanse las puertas: y córtales en piezas la cabeza de todos; y el postrero de ellos mataré á cuchillo: no habrá de ellos quien se fugue, ni quien escape.
2 Aunque cavasen hasta el infierno, de allá los tomará mi mano; y si subieren hasta el cielo, de allá los haré descender.
3 Y si se escondieren en la cumbre del Carmelo, allí los buscaré y los tomaré; y aunque se escondieren de delante de mis ojos en el profundo de la mar, allí mandaré á la culebra, y morderálos.
4 Y si fueren en cautiverio, delante de sus enemigos, allí mandaré al cuchillo, y los matará; y pondré sobre ellos mis ojos para mal, y no para bien.
5 El Señor Jehová de los ejércitos es el que toca la tierra, y se derretirá, y llorarán todos los que en ella moran: y subirá toda como un río, y hundiráse luego como el río de Egipto.
6 El edificó en el cielo sus gradas, y ha establecido su expansión sobre la tierra: él llama las aguas de la mar, y sobre la haz de la tierra las derrama: Jehová es su nombre.
7 Hijos de Israel, ¿no me sois vosotros, dice Jehová, como hijos de Etiopes? ¿no hice yo subir á Israel de la tierra de Egipto, y á los Palestinos de Caphtor, y de Chîr á los Arameos?
8 He aquí los ojos del Señor Jehová están contra el reino pecador, y yo lo asolaré de la haz de la tierra: mas no destruiré del todo la casa de Jacob, dice Jehová.
9 Porque he aquí yo mandaré, y haré que la casa de Israel sea zarandeada entre todas las gentes, como se zarandea el grano en un harnero, y no cae un granito en la tierra.
10 A cuchillo morirán todos los pecadores de mi pueblo, que dicen: No se acercará, ni nos alcanzará el mal.
11 En aquel día yo levantaré el tabernáculo de David, caído, y cerraré sus portillos, y levantaré sus ruinas, y edificarélo como en el tiempo pasado;
12 Para que aquellos sobre los cuales es llamado mi nombre, posean el resto de Idumea, y á todas las naciones, dice Jehová que hace esto.
13 He aquí vienen días, dice Jehová en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleva la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán.
14 Y tornaré el cautiverio de mi pueblo Israel, y edificarán ellos las ciudades asoladas, y las habitarán; y plantarán viñas, y beberán el vino de ellas; y harán huertos, y comerán el fruto de ellos.
15 Pues los plantaré sobre su tierra, y nunca más serán arrancados de su tierra que yo les dí, ha dicho Jehová Dios tuyo.
1 Vi o Senhor de pé junto do altar. Ele me disse: Fere o capitel, para que se estremeçam os umbrais. Quebra-os por cima das cabeças de todos; matarei à espada o que restar, sem que ninguém possa fugir nem escapar.
2 Mesmo que desçam à morada dos mortos, minha mão os arrancará de lá; ainda que subam aos céus, eu os farei descer dali;
3 se se esconderem no cimo do Carmelo, eu os irei buscar e os tirarei de lá; se se ocultarem de meus olhos no fundo do mar, lá ordenarei ao dragão que os morda;
4 se forem levados cativos pelos inimigos, ordenarei à espada que os mate. Terei meus olhos fixos neles para o seu mal, não para o seu bem.
5 O Senhor Javé dos exércitos toca a terra, ela se funde, e todos os seus habitantes ficam de luto. Todo o solo cresce como o Nilo, e baixa como o rio do Egito.
6 Aquele que constrói seus aposentos no céu, e firma sobre a terra a abóbada celeste, aquele que convoca as águas do mar, e as derrama sobre a face da terra - Senhor é o seu nome.
7 Acaso não sois vós para mim, ó filhos de Israel, como os cuchitas? - oráculo do Senhor. Se tirei Israel do Egito, não tirei também os filisteus de Caftor, e os sírios de Quir?
8 Eis que os olhos do Senhor Javé estão fixos no reino pecador: eu o farei desaparecer da face da terra, mas não destruirei completamente a casa de Jacó - oráculo do Senhor.
9 Porque vou dar ordens; vou sacudir a casa de Israel entre todas as nações, como se sacode o grão na peneira sem que um só grão caia por terra.
10 Todos os pecadores do meu povo perecerão pela espada, embora digam: Não seremos atingidos, não virá sobre nós o mal.
11 Naquele dia, levantarei a cabana arruinada de Davi, repararei as suas brechas, levantarei as suas ruínas, e a reconstruirei como nos dias antigos,
12 para que herdem o que resta de Edom, e de todas as nações sobre as quais o meu nome foi invocado - oráculo do Senhor, que executará estas coisas.
13 Eis que vêm dias - oráculo do Senhor - em que seguirão de perto o que planta e o que colhe, o que pisa os cachos e o que semeia; o mosto correrá pelas montanhas, todas as colinas se derreterão.
14 Restaurarei então o meu povo de Israel: reconstruirão as cidades devastadas e as habitarão; plantarão vinhas e beberão o seu vinho, cultivarão pomares e comerão os seus frutos.
15 Implantá-los-ei no seu solo, e não serão mais arrancados da terra que lhes dei - oráculo do Senhor, teu Deus.