9 Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
31 Y ellos dijeron: Cree en el Señor Jesús, el Cristo, y serás salvo tú, y tu casa.
20 He aquí, que yo estoy parado a la puerta y llamo; si alguno oyere mi voz, y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para que nos perdone nuestros pecados, y nos limpie de toda maldad.
6 Jesús le dice: YO SOY el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
12 Y en ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
21 y acontecerá que todo aquel que invocare el Nombre del Señor, será salvo.
23 Porque la paga del pecado es muerte; mas la gracia de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro.
12 Mas a todos los que le recibieron, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios, a los que creen en su Nombre;
38 Y Pedro les dice: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesús, el Cristo, para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.