7 El rico se enseñoreará de los pobres, y el que toma prestado es siervo del que presta.
24 Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o se llegará al uno y menospreciará al otro; no podéis servir a Dios y a las riquezas.
6 Ya que el SEÑOR tu Dios te habrá bendecido, como te ha dicho, prestarás entonces a muchos gentiles, mas tú no tomarás prestado; y te enseñorearás de muchos gentiles, pero de ti no se enseñorearán.
27 No detengas el bien de sus dueños, cuando tuvieres poder para hacerlo.
21 Lámed El impío toma prestado, y no paga; mas el justo tiene misericordia, y da.
30 Y a cualquiera que te pidiere, da; y al que tomare lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva.
7 Pagad a todos lo que debéis; al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que temor, temor; al que honra, honra.
5 Sean las costumbres vuestras sin avaricia, contentos de lo presente (porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré.)
11 Las riquezas de vanidad disminuirán; pero el que recoje trabajando las se aumentará.
8 No debáis a nadie nada, sino amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, cumplió la ley.
28 Porque ¿cuál de vosotros, queriendo edificar una torre, no cuenta primero sentado los gastos, para ver si tiene lo que necesita para acabarla?
12 Y suéltanos nuestras deudas, como también nosotros soltamos a nuestros deudores.