4 En pos del SEÑOR vuestro Dios andaréis, y a él temeréis, y guardaréis sus mandamientos, y escucharéis su voz, y a él serviréis, y a él os allegaréis.
8 En esto es clarificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.
35 En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
60 Me apresuré, y no me retardé en guardar tus mandamientos.
26 El que me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Al que me sirviere, mi Padre le honrará.
1 Canción de las gradas. Bienaventurado todo aquel que teme al SEÑOR, que anda en sus caminos.
31 Y decía Jesús a los judíos que le habían creído: Si vosotros permaneciéreis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
32 y conoceréis la Verdad, y la Verdad os libertará.
12 Y les habló Jesús otra vez, diciendo: YO SOY la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, mas tendrá la luz de la vida.
17 Así también la fe, si no tuviere las obras, es muerta en sí misma.
33 En todo camino que el SEÑOR vuestro Dios os ha mandado andaréis, para que viváis, y os vaya bien, y tengáis largos días en la tierra que habéis de heredar.
27 No te desvíes a diestra, ni a siniestra; aparta tu pie del mal.
20 Y el Dios de paz que sacó de los muertos al Gran Pastor de las ovejas por la sangre del Testamento eterno, al Señor nuestro Jesús,
21 os haga perfectos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesús, el Cristo, al cual es la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
10 Porque somos hechura suya, criados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó para que anduviésemos en ellas.
34 Y llamando a la multitud con sus discípulos, les dijo: Cualquiera que quisiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su madero, y sígame.
8 Y el SEÑOR es el que va delante de ti; él será contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas, ni te intimides.
5 Y el Señor enderece vuestros corazones en la caridad de Dios, y en la esperanza del Cristo.
21 Le dice Jesús: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
21 Porque para esto sois llamados; pues que también el Cristo fue afligido por nosotros, dejándonos ejemplo, para que vosotros sigáis sus pisadas;
133 Ordena mis pasos con tu palabra; y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.
23 Mem Por el SEÑOR son ordenados los pasos del hombre bueno , y él quiere su camino.
15 Y si mal os parece servir al SEÑOR, escogeos hoy a quién sirváis; o a los dioses a quien sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos, en cuya tierra habitáis; que yo y mi casa serviremos al SEÑOR.
25 Si vivimos por el Espíritu, andemos también en el Espíritu.
38 Y el que no toma su madero, y sigue en pos de mí, no es digno de mí.
17 Y todo lo que hagáis, sea de palabra, o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias al Dios y Padre por él.
1 Así que sed imitadores de Dios como hijos amados;